Guía para disfrutar de una casa rural en verano

Guía para disfrutar de una casa rural en verano

Alquilar una casa rural en verano es una forma fantástica de escapar del ajetreado ritmo de vida de la ciudad, del estrés laboral, y en muchos casos, también del calor.

Si estás valorando esta opción para tus próximas vacaciones, no te pierdas este artículo. Te contamos todo lo que debes saber para que tu estancia en una casa rural en verano sea todo un éxito.

Escoge la casa rural en verano perfecta para ti y los tuyos

Elegir la casa rural adecuada es el primer paso para asegurar unas vacaciones veraniegas relajantes y a la altura de tus gustos y necesidades.

¿Qué factores tener en cuenta?

  • Ubicación. ¿Prefieres estar cerca de la montaña, en una zona costera, o en medio de un frondoso bosque? La ubicación de la casa rural influirá en las actividades que puedes realizar y en el entorno natural que disfrutarás. Si te gusta el senderismo o las rutas en bicicleta, opta por una casa rural cerca de rutas bien señalizadas, como las que puedes encontrar en Navas de San Juan, en Jaén.
  • Tamaño. Si viajas en familia o en grupo de amigos, asegúrate de que la casa tenga el espacio suficiente para todos. Muchas casas rurales cuentan con varias habitaciones y amplias zonas comunes, ideales para pasar tiempo juntos.
  • Comodidades. Revisa las instalaciones disponibles, como piscina, barbacoa, chimenea, terrazas, o jardines. Estos detalles pueden marcar la diferencia y hacer más completa la experiencia. Si quieres pasar el verano en el campo en el sur, una piscina o zonas de sombra cercanas a ríos o embalses serán esenciales para refrescarse.

Una casa rural preparada para el verano

Aunque las casas rurales suelen estar diseñadas para proporcionar una estancia agradable en cualquier época del año, aquí van algunos consejos para asegurar que tu experiencia sea lo más cómoda posible en verano.

  • Ventilación natural. Aprovecha las primeras horas de la mañana y las últimas de la tarde para abrir ventanas y puertas, permitiendo que el aire fresco circule por la casa. Durante las horas de más calor, cierra las ventanas y baja las persianas para evitar que el calor entre.
  • Sombras y toldos. Elige una casa rural en verano que cuente con terraza o patio, con sombrillas, toldos o vegetación para crear espacios de sombra donde puedas relajarte durante el día sin que el sol llegue a ser molesto.  
  • Uso de la piscina. Los alojamientos con piscinas o jacuzzis son un excelente lugar para relajarse, disfrutar del sol y combatir el calor.
  • Electrodomésticos y equipos. Revisa si la casa cuenta con ventiladores o aire acondicionado en las zonas comunes o en las habitaciones. Si no es así, considera llevar un pequeño ventilador portátil para mayor comodidad.

Aprovecha las actividades al aire libre

Una de las grandes ventajas de alojarse en una casa rural es la posibilidad de disfrutar de un entorno natural espectacular. El verano es el momento perfecto para aprovechar al máximo las actividades al aire libre, ya sea explorando el entorno o disfrutando de los espacios de la propia casa.

Senderismo y cicloturismo

Las casas rurales suelen estar ubicadas cerca de rutas de senderismo o caminos ideales para el cicloturismo. Organiza una caminata en familia o con amigos por los alrededores, disfrutando de paisajes naturales únicos, o alquila una bicicleta para recorrer rutas rurales. En la web del ayuntamiento puedes descubrir las mejores rutas y actividades en Navas de San Juan.

Picnics al aire libre

Un picnic es una actividad ideal y económica para el verano. Busca un espacio con sombra cerca de la casa, prepara una cesta con productos frescos locales y disfruta de una comida al aire libre rodeado de naturaleza.

Rutas a caballo

Muchas zonas rurales ofrecen rutas a caballo para explorar el entorno. Esta es una actividad perfecta para disfrutar en grupo y experimentar la naturaleza de una manera diferente.

Observación de estrellas

Las noches en el campo suelen ser frescas y despejadas, perfectas para observar el cielo. Tómate una noche para disfrutar de una sesión de observación de estrellas, lejos de la contaminación lumínica de la ciudad.

Prueba gastronomía local

Una parte fundamental de la experiencia rural es disfrutar de la gastronomía local. En muchas casas rurales tendrás acceso a una cocina completamente equipada, lo que te permitirá preparar tus propios platos utilizando productos frescos de la zona.

Visita los mercados locales o las tiendas del pueblo cercano para adquirir productos frescos como frutas, verduras, embutidos, quesos y vinos. Los productos de temporada suelen ser de la mejor calidad.

Si la casa cuenta con una zona de barbacoa, no dudes en organizar una comida o cena al aire libre.

Investiga las recetas tradicionales de la zona en la que te alojas y atrévete a prepararlas, o si no te apetece cocinar, disfruta de los restaurantes locales.

Conclusión

El verano en una casa rural no solo es para actividades, también es el momento perfecto para relajarte y desconectar del mundo. Aprovecha la tranquilidad del entorno para descansar y recargar energías.

Lleva contigo ese libro que llevas tiempo queriendo leer, e intenta desconectar del teléfono móvil y la tecnología durante tu estancia. Usa el tiempo para reconectar contigo mismo, con la naturaleza y con tus acompañantes.

Al seguir estos consejos, podrás aprovechar al máximo tu estancia en una casa rural en verano, ya sea relajándote en un entorno tranquilo o explorando todas las actividades al aire libre que se puedan realizar en las cercanías.

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